"Tradicionalmente se contempla el conflicto palestino-israelí como un problema complejo, anclado en raíces históricas, étnicas y religiosas, y con unos puntos de fricción principales.
El principal hecho objetivo es,
sin duda, los más de treinta años de ocupación #ilegal de los territorios #palestinos por parte de #Israel. Detrás de esta situación, los asentamientos
israelíes en territorios ocupados, los #refugiados palestinos y su derecho de retorno, el estatuto definitivo de la ciudad de #Jerusalén y el control de los
recursos #hídricos en la región, constituyen otros problemas que por sí mismos dificultan una solución negociada y tienden a perpetuar la situación
anterior."
(El conflicto palestino-israelí, de Miguel Peco Yeste y Manuel Fernández Gómez)